El senderismo es un deporte que en estos últimos años se ha puesto muy de moda. Es barato de practicar (con ropa cómoda y unas zapatillas adecuadas hay bastante). No es competitivo ya que lo que prima en este deporte es el compañerismo y estar en contacto con la naturaleza y aquí cada uno pone sus límites.
Además, al ganar cada vez más adeptos en casi todas las ciudades hay algún club excursionista, de montañismo o exclusivo de senderismo que periódicamente ofrece rutas para todos los inscritos en él y foráneos que quieran probar la experiencia.
Como es natural, al ser una actividad física, el trekking aporta numerosos beneficios para la salud, tanto físicos como mentales, a continuación intentaremos esclarecer algunos, gracias a la ayuda de nuestros compañeros de VidaTrekking.
Beneficios físicos del trekking
Como en cualquier deporte, practicando senderismo nos ponemos en forma, además, al no ser un deporte de altas exigencias (aunque puede haber muchos niveles técnicos y de condiciones físicas requeridas) en cada excursión nos podemos ir marcando unas metas que harán que vayamos mejorando nuestro estado físico y mejoren nuestra resistencia y capacidad pulmonar. Por supuesto, la musculatura del inferior será la más beneficiada con la práctica de este deporte.
Al ser un deporte aeróbico en el que activamos la circulación, es un ejercicio ideal para prevenir enfermedades cardíacas ya que este tipo de actividad fortalecerá nuestro corazón. Además, por esta misma razón, hacer excursiones por la montaña es ideal para reducir la tensión alta.
Los ejercicios aeróbicos son los mejores para perder peso, ya que requieren de un esfuerzo constante durante un tiempo prolongado y esto hace que quememos muchas calorías. Todo depende de la dificultad del recorrido y el ritmo que llevemos, pero con una hora de senderismo se queman de media unas 400 Kcal. Cuanta mayor sea la pendiente a la que nos enfrentemos, lógicamente, más grasa quemaremos.
Andar ayuda a quitar tensiones musculares, por lo que el trekking alivia los dolores de espalda. Además, también es una forma de aumentar nuestra densidad osea y prevenir la osteoporosis, enfermedad que no solo se previene con una buena alimentación, si no con ejercicio también. También cabe indicar que mejora los síntomas de la artritis, enfermedad sin cura.
Finalmente pero no menos importante, al respirar aire puro podemos prevenir muchas enfermedades respiratorias, incluso a algunas personas con dolencias pulmonares les recomiendan la práctica de senderismo, siempre que sea de forma moderada. Un aire de calidad y lejos de la contaminación y aire viciado de las ciudades hará que nuestros pulmones se sientan mucho mejor.
Beneficios psicológicos de practicar senderismo
A continuación vamos a analizar algunos de los beneficios que tiene el trekking para nuestra mente y nuestro bienestar que no son pocos.
Andar refuerza algunos aspectos de nuestra mente, por ejemplo la memoria, la planificación o la capacidad de reacción ante situaciones inesperadas. Además, nos permite socializar con otras personas que nos encontremos por el camino, esto siempre es bueno para olvidarnos de los problemas de nuestra vida cotidiana.
Al estar en contacto con la naturaleza, lejos del ruido de la ciudad, el estrés y la presión del trabajo, el quehacer del hogar, etc. Sentiremos una paz interior que nos relajará mucho para afrontar de nuevo los retos que tengamos por delante. Muchas empresas hacen este tipo de actividades como válvula de escape para sus empleados y para mejorar el trabajo en equipo.
Al ir superándonos poco a poco (si lo practicamos de forma regular) iremos ganando en confianza y cada vez nos sentiremos mejores con nosotros mismos y eso se nota tanto en nuestro desempeño diario como en nuestro aspecto.
Todo ejercicio produce un incremento de la producción de endorfinas que es una sustancia que genera el cerebro y tiene que ver con el estado de ánimo, el placer y en la ayuda para conciliar el sueño, así que si practicamos senderismo estaremos favoreciendo la creación de esta sustancia, muy beneficiosa para combatir el estrés y sus síntomas como falta de energía o depresión.
Finalmente, gracias a todos estos beneficios mentales, como es natural, nuestro estado de ánimo mejorará sustancialmente, haciéndonos mas abiertos hacia los demás y menos irritables. Además, al vernos mejor, querremos practicar aún más trekking, poniéndonos metas más altas que, al superarlas, harán que nos sintamos mejor, estemos en mejor forma y cada vez nos marquemos nuevos retos (dar el salto al trail, excursiones de varias jornadas, etc.).
Por todas estas razones y algunas más que seguro que nos dejamos, el senderismo es un deporte muy recomendable para nuestra salud tanto física como mental, así que no os lo penséis dos veces, enfundaros ropa cómoda y zapatillas aptas para la montaña, agua y un tentempié para la mitad del camino y ¡a andar!