Desafortunadamente, con ánimo y buena voluntad no es suficiente para lograr una práctica adecuada de ejercicios. Para los que se inician en el “arte” de correr, con el objetivo de mejorar su estado psíquico y emocional, nos gustaría darles a conocer algunos consejos básicos para realizar esta actividad de manera óptima y segura.
Adaptación y progresión
Primero que todo: correr no es cosa de un día. Como tampoco los son los resultados que obtendremos de esta actividad. Lo más importante es tener en cuenta que se trata de un ejercicio al que debemos adaptarnos primero. Si es posible, los primero días deberemos dedicarle diez o veinte minutos, hasta adquirir el hábito y que nos resulte algo familiar. Si debes tener una palabra en mente, es precisamente esta: mucha práctica.
También es importante que seas conscientes de tus posibilidades. Unas metas muy altas terminarán por desanimarte y desistir en el intento. Trata de comenzar con una velocidad que te resulte asequible, ni muy cómoda ni muy exigente. Puedes medir tu rendimiento por tramos recorridos, de esta forma verás directamente el resultado de tus propósitos. No midas el tiempo, simplemente trata de completar tu recorrido. Una vez que ganes en resistencia, podrás proponerte hacer el mismo tramo en menos tiempo.
Constancia ante todo
Recuerda: lo más importante es que no desistas. Si te es imposible proseguir con el ritmo, aminora la marcha. Después de todo, caminar apresurado también quema calorías. Combina ambas técnicas pero no te detengas del todo. Al principio puede resultar un poco agobiante, pero es necesario que sepas que correr se trata de un ejercicio aeróbico, o sea que implica el uso de oxígeno en el cuerpo. Si te falta mucho el aire, quizás no estás ejercitándote de la manera adecuada.
Otro elemento que te aportará beneficios es realizar la carrera en grupo. Si logras sumar a dos o tres de tus compañeros, la actividad te resultará mucho más placentera. El apoyo colectivo será tu mejor aliado y contribuirá a tu motivación siempre y cuando, todos cumplan responsablemente con el horario. Además, sería conveniente que todos tuviesen el mismo nivel de preparación.
Material adecuado
Finalmente, intenta correr sobre superficies que no sean tan rígidas, como el césped o una pista artificial, y mediante el uso de zapatillas diseñadas para el atletismo que reduzcan el impacto al correr. La ropa deberá ser transpirable, ni muy holgada ni muy ajustada, preferiblemente de algún tipo de algodón. Al finalizar cada jornada, no olvides registrar tus marcas personales. Cada pequeño paso que logres dar, es una conquista que te animará a ir a por más.